A fin de evitar contratiempos y prisas de
última hora es muy recomendable preparar
la celebración con tiempo, teniendo así más
margen de tiempo para encontrar ofertas
o precios más competitivos. Para la compra
de los detalles es importante ir mirando al menos
6 meses antes los que más te gusten y comprarlos
al menos 2 meses antes de la celebración para
poder gestionar cualquier incidencia o retraso imprevisto.